© Daniel Casares Román
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Y ahora el consejo del día:
Coge tu cámara digital, las tarjetas, las baterías y el cargador y lo metes en un cajón bien cerrado. A continuación apagas el Mac y le echas por encima un paño amplio. Coges el portátil, los discos duros externos, los cables USB, tarjetas y baterías y las guardas en una caja junto al teléfono móvil y la agenda de clientes. Pon la caja en lo más alto del ropero o debajo de la cama. Bien guardada. Ahora agarra la cámara tradicional, la que ahora llaman analógica, la de toda la vida (la marca y el modelo da igual pero si es mecánica, de esas que usan enfoque manual, exposición manual y palanquita para pasar la película... mejor!!) Píllate una docena de rollos y un fotómetro de mano. El siguiente paso consiste en lanzar un dardo hacia un mapa mundi colocado a tres metros de ti. Busca por Internet el primer vuelo hacia ese lugar y lánzate al vacío sin pensarlo dos veces. Una vez aterrizado en ese lugar vuelve a disfrutar de la FOTOGRAFÍA en estado puro (olvídate de los trabajos comerciales que te esperan a la vuelta) Aquí sólo estáis tú y la cámara. NOTA: No lo intentéis hacer con una cámara digital. El procedimiento no es el mismo y la experiencia no sale. (RECOMENDACIÓN: Haced esto al menos una o dos veces al año. Os lo recomiendo efusivamente).
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El Proceso E-6
Con relativa frecuencia me preguntan por el procesado de mis fotografías "¿a qué laboratorio mandas tus carretes?" es la pregunta más usual.
Otras veces me piden referencias de laboratorios cercanos que sigan revelando con calidad en 2019...
En fin, yo lo que uso desde hace mucho tiempo es un simple tanque de revelado Paterson, el de toda la vida.
Comencé a revelar con él en Blanco y Negro en el año 91 cuando estudiaba fotografía, y pasar de ese proceso al proceso de color (E-6) fue tan simple como cambiar los químicos, los tiempos y las temperaturas. Desde entonces, jamás volví a enviar uno de mis rollos a ningún laboratorio. Yo lo proceso en mi casa.
El 99% del material que puedes ver en este blog y en mi web (www.danielcasaresroman.com) está realizado con película Fujichrome Velvia de Iso: 50/18º (digo el 99% ya que en alguna ocasión me "tropiezo" con la foto y zasss! en ese momento te coge con la cámara digital en las manos y claro...
Procesar tú mismo tu propio material con el termómetro en una mano, y la tabla de los tiempos en la otra, es algo que recomiendo a toda aquella persona que quiera experimentar la FOTOGRAFÍA en estado puro.
Yo lo hago por puro placer. No creo que sea algo que le dé más mérito a la obra (aunque hay gente que piense que sí...) Yo lo hago por disfrutar, por solazarme con la fotografía artesanal, para romper con la monotonía del trabajo diario comercial que evidentemente sí realizo en soporte digital.
Cualquier persona que se anime a procesar sus propios rollos y pueda tener alguna duda o necesitar información, yo gustosamente le puedo pasar tablas de tiempos, rotación y temperaturas que espero le sirvan de utilidad!
A vuestra disposición!
(Nota: Las placas de 9x12 las revelo en un tanque cuadrado, en el de Paterson sería imposible!! :)
© Daniel Casares Román
16 comentarios:
Tenía 23 años cuando tomé esta foto. Es una de esas imágenes simples que simplemente me siguen gustando. Allá a finales de 1999, y tras dejar (pensé que para siempre) eso de publicar en los periódicos locales de mi ciudad (después comprobé que volvería a hacerlo alguna vez más) y con el poco dinero que pude reunir durante aquel verano, no se me ocurrió otra cosa que viajar a Guinea Ecuatorial.
No era la primera vez que pisaba África, aunque sí la primera vez que aterrizaba en el "África Negra".
Concretamente a la Isla de Bioko, allá donde casi se confunden ambos hemisferios.
¿Por qué Guinea Ecuatorial??
Fueron dos razones las que me llevaron a parar por aquellas latitudes:
La primera: Un libro de la escritora ecuatoguineana María Nsué Angüe. Si os soy sincero no recuerdo ni el nombre del libro. Eran diferentes relatos cortos sobre todo el universo que rodeaba al bosque fang. El libro sólo contenía texto. Ni una sola ilustración, cosa bastante frustrante un amante de las imágenes.
Así que lo que hice durante ese mes fue un recorrido gráfico, pausado, muy pausado, a través de la obra literaria de esta escritora de etnia fang.
La segunda razón fue el idioma. Trabajar en un país situado en pleno corazón del África, cuyo idioma oficial es el español era una ventaja a tener en cuenta. Por aquel entonces mi inglés no era muy fino, mi francés casi de risa (eso no ha mejorado con el tiempo) y el portugués prácticamente nulo. Así que los destinos de aquellos primeros reportajes, se veían supeditado en su mayoría a este "leve" inconveniente...
También es cierto que con el tiempo uno descubre que no hace falta ser un perfecto políglota precisamente para moverse por el mundo, pero en fin... en aquel entonces estaba yo bastante... verde!
La foto la hice en el antiguo secadero de cacao que hay a la salida de Malabo, apurando las últimos momentos de luz de aquel día.
El soporte, cómo no, Fujichrome Velvia 50.
Jo, me encanta como "relatas" las fotos...eso hace que la imagen recobre vida.
Un beso!
Maravillosa!
Hermosisima imagen! Gracias por la informacion. Suena a que fue ademas un bellisimo viaje lleno de imagenes "literarias".
Pues si a ti te gusta fijate a mi, un excelente contraluz con una buena composicion, un cordial saludo desde Reinosa Daniel.
¿imagen simple? Pues a mí me encantaría hacer estas tomas simples, entre otras cosas porque estaría en Africa ;))
Enhorabuena y gracias por compartirla
besos
Hola Daniel,
Esto más que simple, simplemente podria llamarse memorias de Africa, unos colores y contraluces perfectos, con un buen encuadre.
Un saludo.
Daniel:
Vengo a darte las gracias por tu comentario y me encuentro con esta maravillosa historia que acompaña una foto que lo es aun más si cabe.
Mi padre y mi abuelo pasaron allá su infancia, luego mi padre regresó y a mis 8 años guardaba cada carta que me escribía atadas con un lazo de color pálido. Yo nunca he estado pero recuerdo cada detalle de los años que ellos pasaron allí y que de alguna forma pertenecen a mi vida.
No se explicarlo, es como si hubiese estado allí.
Mi padre y mi abuelo fueron y son entre otras cosas unos fotógrafos sensibles y cercanos a tu mirada y a tu forma de expresarla. Ha sido precioso encontrarme con esta foto.
Como soñar que estuve en ese atardecer.
Un abrazo grande.
PD: Juanes vio la foto y de esa boca solo sale santa dulzura, ha sido un privilegio trabajar con él y una experiencia inolvidable. Besos
Recuerdo cuando me dijiste que te marchabas a Guinea.De siempre has sabido que serias fotógrafo,eso siempre me ha hecho sentir un gran respeto y admiración por lo que haces y, si además ,ves una foto tuya,cualquiera,notas que das todo por tu trabajo.Enhorabuena.
Gracias a todos!
Tenés unas fotos increibles!!
Sobre todo las de gente, y representaciones de cada lugar!
Son impactantes,los colores y la belleza de las imágenes son indescriptibles!!
Me encantan!!!
Un saludo!
Hermosa fotografía de un bello lugar y muy bien descrito. Gracias, Daniel, por acercarnos a estos maravillosos rincones del mundo. Saludos.
Grandioso!
Muy buena la foto me gusta mucho la tonalidad q tiene.
Una postal hermosa, verdaderamente lo es.
bendiciones.
criss
Genial esta foto, me encantan los colores cálidos que captaste.Por cierto das cursos? Envíanos la información a Gestores culturales, el blog que sigues.A parte de para difundir, es por interés personal, ya que la fotografía en mi hobby
Saludos
Marta
http://expertogestioncultural.blogspot.com/
http://gabinetedecuriosidadesyrarezas.blogspot.com/
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